Como diría Berugo: atrévase a soñar!
Viendo algunas de las últimas noticias en la edición del día del gran diario argentino, me pregunto realmente si habrá límites, escrúpulos, vergüenzas, verdades, mentiras y demases en lo que a la conquista del espacio exterior se refiere. Mientras algunos se arrepienten, otros quieren ir mas allá y otros mas siguen con descubrimientos. Como nunca tendremos la certeza de saber la verdad de la milanesa en estas cuestiones (ya sea por ignorancia conciente o de la otra...) recomiendo a todos aquellos que osaron posar sus ojos sobre estos humildes escritos a que osen hacerlo también sobre la lectura de la injustamente menospreciada literatura de ciencia ficción. O sea, imaginen que la gente que leyó a Julio Verne doscientos años atrás ya podría vislumbrar un futuro de submarinos y cohetes a la luna; y todo por dejar volar la imaginación a traves de las historias de unos tipos que vaya si tenían imaginación. Si quieren iniciarse en este viaje fantástico les puedo recomendar varios autores como Philip K. Dick, Robert Silverberg, Ray Bradbury (Crónicas Marcianas es una novela sublime) Arthur Clarke, Brian Aldiss, H.G. Wells y muchos mas, y lo bueno de esto es que cada uno de estos autores tiene muchos cuentos muy cortos donde ustedes pueden "sacarle la ficha" en cuanto al estilo narrativo que usan. Pero si realmente quieren inmiscuirse en la Ciencia Ficción (mas ciencia que ficción) tiene que leer si o si a mi autor favorito, Isaac Asimov. Resulta que este tipo, además de ser uno de los científicos mas reconocidos (fue quién popularizó la palabra "robot"), fue un talentoso a la hora de contar historias e inventar personajes. Pero el mayor mérito de el tío Isaac esta sin duda en tejer tramas y situaciones de personas y seres humanos reales y tangibles en un marco de ciencia ficción. Por eso, si son lectores de alma y piensan que la Sci Fi es un género "menor", dénle una oportunidad a este genio. Si por el contrario son de los que le escapan a los libros, tal vez las historias futuristas de robots, naves y extraterrestres sean la puerta que les falte abrir para realmente dejarse atrapar por la literatura. Besos y vasos
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